Una infracción (manejar ebrio) impidió que este inmigrante indocumentado obtuviera la residencia a través de su matrimonio. Arrestado en una redada en su trabajo, y de ahí deportado, siente que la separación de su familia es un castigo cruel por un error cometido hace mucho. Después de varios intentos frustrados de unirse de nuevo con su familia, ya se resigna a vivir separado de ellas en México.