Jonatan Ibarra nos cuenta cómo llegó a los Estados Unidos a los 12 años y cómo pudo haberse quedado por la amnistía salvadoreña. En su adolescencia comenzó a juntarse con pandillas y fue arrestado y deportado a El Salvador, en donde su vida corría peligro por los grupos de exterminio y acoso de la policía. Después de haber sido deportado de los E.E.U.U. varias veces, decide irse a la Ciudad de México en busca de una vida mejor.