Lleno de un sentido idealista del deber hacia su país de origen, el narrador anónimo regreso aMéxico para convertirse en un oficial de policía. Tenía la intención de hacer su parte para lucharcontra la corrupción institucional, pero lo que encontró fue un sistema cargado de violencia ydeshonestidad tan generalizada como para sentirse insuperable. En un año, su servicio públicotermino en mediode amenazas de tortura y muerte tanto del cartel como de sus compañerosoficiales.