Fredi García Alverdín emigró a Estados Unidos a los 14 años con sus padres, hermano y hermana. Después de egresar de la preparatoria, sus metas educacionales fueron truncadas al no contar con documentos migratorios para seguir estudiando. Sin embargo, su persistencia lo ayudó a buscar la manera de acceder a una educación a nivel superior y de posgrado, logrando una licenciatura en ciencia política, una licenciatura en sociología y una maestría en práctica sociológica. Tras dos décadas de vivir como indocumentado, regresó a México en 2011 después de firmar una salida voluntaria ante un juez de migración. Su constante resiliencia lo llevó a terminar un doctorado en estudios de migración, uno de sus sueños hecho realidad.