RESUMEN

En la parte V, José Luis cuenta acerca de la caravana de migrantes con discapacidades que, luego de atravesar diferentes ciudades concientizando a la población, llegó a Washington, D.C. En la capital estadounidense esperaban reunirse con el entonces presidente Obama, pero la reunión nunca pudo llevarse a cabo. En cambio, se reunieron con congresistas, a quienes les informaron acerca de su situación. Luego rentaron una casa en Maryland. Al no haber ninguna organización que los apoyara con dinero o comida, tuvieron que subsistir con la generosidad de las personas que empatizaban con su caso. Luego de residir un año en Maryland, en un contexto en el que el ahora presidente Trump endurecía su discurso antimigrante, decidieron ir cada uno por su lado. En Los Angeles, CA, siguiendo la recomendación de un grupo de monjas que había conocido en México, José Luis se puso en contacto con Richard Estrada, sacerdote de la Iglesia de la Epifanía, conocido por ayudar a migrantes. El padre Estrada, cuenta José Luis, fue quien lo motivó a organizar a otros inmigrantes indocumentados con discapacidad.